Escrituras
Hebreos 1


Epístola del Apóstol San Pablo
a los
Hebreos

Capítulo 1

El Hijo es la imagen misma de la persona del Padre — Cristo es el Hijo Unigénito y, por tanto, es superior a los ángeles.

1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por medio de los profetas,

2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien, asimismo, hizo el universo,

3 quien, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,

4 hecho tanto superior a los ángeles cuanto alcanzó por herencia más excelente nombre que ellos.

5 Porque, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás:Mi hijo eres tú,yo te he engendrado hoy,y otra vez:Yo seré para él Padre,y él será para mí hijo?

6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Y adórenle todos los ángeles de Dios.

7 Y ciertamente, de los ángeles dice:El que hace a sus ángeles espíritus,y a sus ministros llama de fuego.

8 Pero del hijo dice:Tu trono, oh Dios, es por los siglos de los siglos;cetro de equidad es el cetro de tu reino;

9 has amado la justicia y aborrecido la maldad,por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo,con óleo de alegría más que a tus compañeros.

10 Y:Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra,y los cielos son obra de tus manos.

11 Ellos perecerán, mas tú permaneces;y todos ellos se envejecerán como una vestidura;

12 y como un vestido los envolverás, y serán mudados;pero tú eres el mismo,y tus años no acabarán.

13 Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo jamás:Siéntate a mi diestra,hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?

14 ¿No son todos espíritus ministrantes, enviados para servir a favor de los que serán herederos de la salvación?