Seminarios implementará una nueva iniciativa de Dominio de la doctrina

Por Marianne Holman Prescott, redactora de Church News

  • 8 Junio 2016

Jóvenes se reúnen para una clase de seminario en la República Dominicana. Durante el curso del próximo año, los instructores de seminario de todo el mundo implementarán en sus clases una nueva iniciativa —Dominio de la doctrina— con el fin de ayudar a los alumnos a entender la doctrina del Evangelio.  Fotografía cortesía de Chad H. Webb.

Puntos destacados del artículo

  • El nuevo programa de Dominio de la doctrina reemplazará a Dominio de las Escrituras.
  • El programa Dominio de la doctrina permite a los alumnos estudiar, hacer preguntas y enseñar unos a otros.
  • El programa está diseñado para ayudar a los alumnos a llegar a ser espiritualmente autosuficientes.

“Esto no significa cien respuestas a cien preguntas. Esto es más sobre cómo piensan en la información y buscan fuentes confiables, y cómo se formulan preguntas desde una perspectiva del Evangelio en lugar de una del mundo”. —Chad H. Webb, administrador de Seminarios e Institutos de Religión

Durante el curso del próximo año, los instructores de seminario de todo el mundo implementarán en sus clases una nueva iniciativa —Dominio de la doctrina— con el fin de ayudar a los jóvenes de la Iglesia a comprender la relación entre la doctrina del Evangelio y cómo aplicarla en su vida diariamente.

Presentada en febrero por el élder M. Russell Ballard, del Cuórum de los Doce Apóstoles, durante la transmisión anual del devocional “Una velada con una Autoridad General” para el personal de seminario e instituto, la nueva iniciativa de seminario implica permitir el aprendizaje del Evangelio e instrucción de una manera más profunda.

“Hace tan solo una generación, el acceso de nuestros jóvenes a la información sobre nuestra historia, doctrina y prácticas estaban limitadas básicamente a los materiales impresos por la Iglesia”, dijo el élder Ballard en ese discurso. “Pocos alumnos estuvieron en contacto con interpretaciones alternativas. En su mayoría, nuestros jóvenes vivieron una vida protegida”.

Reconociendo que el curso de estudios en este momento —aunque bienintencionado— no prepara a los alumnos para el ambiente en el que viven actualmente, el élder Ballard habló sobre la gran necesidad de que los jóvenes se sientan a gusto haciendo preguntas mientras se les enseña la doctrina del Evangelio.

“Los alumnos tienen acceso instantáneo virtualmente a casi a todo lo relacionado con la Iglesia desde todos los puntos de vista posibles”, dijo el élder Ballard. “Hoy, lo que ven en sus dispositivos móviles puede ser tanto un desafío para la fe como un promotor de la fe”.

En un esfuerzo para que los alumnos estén informados, con conocimiento y se les enseñe espiritualmente sobre la doctrina e Historia de la Iglesia, el nuevo Dominio de la doctrina se ha agregado al curso de estudio de seminario.

“Estos jóvenes están inmersos en un mundo digital donde literalmente están siendo bombardeados cada día con voces y mensajes del mundo”, dijo el élder Kim B. Clark, Setenta Autoridad General y Comisionado de Educación de la Iglesia. “Muchas de esas voces y mensajes despiertan preguntas y análisis de cuestiones actuales directamente relacionadas a lo que creemos”.

El nuevo programa Dominio de la doctrina proporcionará oportunidades durante las clases de seminario para que los alumnos estudien, hagan preguntas y se enseñen unos a otros. Estará diseñado para aprender cómo aplicar el entendimiento doctrinal a situaciones de la vida real.

“Piensen qué es aquello para lo que los estamos preparando para que lleguen a ser”, dijo el élder Clark. “Deseamos que estén preparados para entrar al templo del Señor y para hacer convenios sagrados con Él y que en verdad comprendan lo que estos significan”.

¿Qué es Dominio de la doctrina?

La base para el nuevo curso de estudio Dominio de la doctrina proviene de diez puntos doctrinales, nueve de los cuales son del curso de estudio para los jóvenes, Ven, sígueme. El primer punto, “Cómo adquirir conocimiento espiritual”, se centra en el modelo del Señor para aprender la verdad.

“El enseñar a los jóvenes el modelo del Señor para adquirir conocimiento espiritual es un esfuerzo para ayudarlos a entender mejor cómo estudiar las Escrituras y las palabras de los profetas, y para orar y actuar con fe y luego vivir las cosas que están aprendiendo”, dijo Chad H. Webb, administrador de Seminarios e Institutos de Religión. “La otra parte de Dominio de la doctrina tiene como fin ayudarlos a estudiar la doctrina como se enseña en las Escrituras, de manera que encuentren respuestas y estén preparados para responder a preguntas doctrinales, históricas y sociales”.

Los otros nueve puntos doctrinales son:

  1. La Trinidad
  2. El Plan de Salvación
  3. La expiación de Jesucristo
  4. La Restauración
  5. Profetas
  6. El sacerdocio y las llaves del sacerdocio
  7. Las ordenanzas y los convenios
  8. El matrimonio y la familia
  9. Mandamientos

El curso de estudio se centrará en tres principios mientras los jóvenes estudien la doctrina del Evangelio:

  1. Actuar con fe
  2. Analizar los conceptos y preguntas con una perspectiva eterna
  3. Procurar mayor comprensión a través de las fuentes divinamente señaladas

“Esto no significa cien respuestas a cien preguntas”, dijo el hermano Webb. “Esto es más sobre cómo piensan en la información y buscan fuentes confiables, y cómo se formulan preguntas desde una perspectiva del Evangelio en lugar de una del mundo”.

El nuevo Dominio de la doctrina reemplazará a Dominio de las Escrituras —donde los alumnos memorizan pasajes de las Escrituras específicos de todos los Libros Canónicos— e incluso estará coordinado con el libro de Escritura que los alumnos estén estudiando ese año.

“Eso significa que Dominio de la doctrina está organizado por temas, no en el orden que aparecen en las Escrituras”, dijo el élder Clark. “Hemos encontrado una manera de tener las Escrituras ahí para que aún tengan 25 pasajes de las Escrituras que son parte de Dominio de la doctrina, pero que en realidad se centran en los temas, temas doctrinales”.

Las lecciones se pueden enseñar por unos minutos cada día en clase o agruparlas en una sola clase por semana —en última instancia los maestros decidirán el Dominio de la doctrina que incluirán en la lección. Las lecciones incluyen estudiar de las Escrituras y de las palabras de los profetas, hacer y responder preguntas difíciles y estudiar con ejemplos.

“Se realiza el mismo esfuerzo que con Dominio de las Escrituras, pero creemos que será de más ayuda y más relevante”, dijo el hermano Webb. “Estudiaremos todos los Libros Canónicos. No tomará el lugar de las lecciones, pero sí del Dominio de las Escrituras y añadirá una dimensión donde los alumnos ahora harán más para entender cómo se aplica la doctrina a sus preguntas y cómo estos principios del Evangelio se aplican a sus propias circunstancias”.

Cómo hacer y responder preguntas

En su discurso, el élder Ballard dijo: “Más que en cualquier otro momento de la historia, sus alumnos también tienen que ser bendecidos al aprender el contenido y contexto doctrinal o histórico por medio del estudio y de la fe, acompañado de un testimonio puro para que puedan experimentar una conversión madura y perdurable al Evangelio, y un compromiso de por vida con Jesucristo”.

Actualmente, para los jóvenes de la Iglesia, el hacer preguntas y que se les haga preguntas no es nada raro. Esperamos, dijo el hermano Webb, que los alumnos vengan a clase con preguntas y que los instructores les enseñen en “un ambiente de fe con alguien en quien ellos puedan confiar, en lugar de pensar: ‘Bueno, nadie quiere responder a mi pregunta, así que la buscaré en internet’”.

“Los [alumnos] escuchan estas preguntas de sus amigos y las ven todo el tiempo —diariamente, a cada hora en las redes sociales— por lo que tales preguntas se han convertido en parte de sus vidas”, dijo el élder Clark. “Esto es algo que ocurre todos los días, lo que nos llevó a sentir fuertemente que necesitábamos hacer de seminario un lugar donde las preguntas no solo son bienvenidas, sino aceptadas. Hablamos sobre las preguntas y luego aprendemos a trabajar con los alumnos para responderlas de una manera que no solo ayude a encontrar respuestas, si las hubiera, sino para que aprendan un proceso que los preparará como personas para ser espiritualmente autosuficientes”.

Para los maestros de seminario, las preguntas por lo general invitan al Espíritu y proporcionan una poderosa oportunidad de enseñanza.

“Si los maestros tienen confianza de que pueden hacerlo de una manera que sea útil y doctrinalmente segura, es más probable que ellos estén deseosos de tener esas conversaciones a que si están incómodos porque no están seguros sobre cómo responder”, dijo el hermano Webb. “Esperamos que esto dé a nuestros maestros más confianza para tratar este tipo de preguntas”.

La capacitación para maestros comienza con la transmisión de capacitación anual para instructores, la cual se llevó a cabo el 14 de junio. Habrá capacitación adicional en áreas de todo el mundo en los próximos meses en preparación para el nuevo año escolar.