La senda del convenio

Estuve esperando este momento por mucho tiempo. Mis padres me habían enseñado lo importante que es esta ordenanza. Gracias a ellos y a mis maestras de la Primaria sé que el bautismo es el primer convenio que hacemos con Dios y por ese medio podemos limpiar nuestros errores.

Me sentía un poco nervioso, pero estaba emocionado. Yo quería que me bautizara mi papá, pero está fuera del país. Tengo la bendición de tener a mis abuelos, ellos me bautizaron y confirmaron.

Durante la confirmación, sentí felicidad de haber tomado esta decisión. Ahora sé que debo asistir todos los domingos a la Iglesia para renovar los convenios y leer las Escrituras. Sé que me van a ayudar a permanecer en la senda y tener el Espíritu Santo conmigo. Aunque mi papá está lejos por el momento, siempre hacemos videollamadas y puedo hablar con él. Sé que es igual con Dios, no podemos llamarlo por videollamada, pero podemos orar para que nos ayude.

Todavía soy pequeño y no entiendo muchas cosas, pero sé que, si soy fiel, el Espíritu Santo me ayudará a permanecer en la senda que me lleve con mi familia de regreso a nuestro Padre Celestial.