Liahona
El Evangelio es la respuesta a todas las preguntas y los problemas de la vida
Marzo de 2024


Mensaje de los líderes del Área

El Evangelio es la respuesta a todas las preguntas y los problemas de la vida

Hace poco, cuando mi esposa y yo estábamos de visita en Salt Lake City, necesitábamos encontrar un cajero automático en la calle. Mientras buscábamos alrededor, oímos una voz que, desde un automóvil aparcado detrás de nosotros, nos dijo: “¿Están buscando algo? ¿Puedo ayudarlos?”. Aquel hombre, que se presentó como Mike, añadió sonriendo que seguramente nos parecería raro que un desconocido nos gritara desde un coche, pero que en Utah no era algo sorprendente. Nos preguntó por nuestra procedencia y se le iluminó la mirada al enterarse de que éramos de Praga. Poco antes había hablado con una amiga suya que estaba teniendo problemas para obtener información sobre sus antepasados de la República Checa, así que, de inmediato, se preguntó si nosotros podríamos ayudarla con algo. Le respondimos que estaríamos encantados de enviarle la información de contacto de hermanos y hermanas que estaban haciendo genealogía en nuestro país. Mike nos dio las gracias, nos despedimos y él se metió en su coche. Al marcharnos, nos dimos cuenta de que Mike había vuelto a salir del coche y se acercaba a nosotros, pero, en esa ocasión, su alegre sonrisa se había convertido en emoción.

Con lágrimas en los ojos, nos dijo lo agradecido que estaba por nuestro breve encuentro y que se sintió inspirado a salir del coche. Durante mucho tiempo había intentado, infructuosamente, ayudar a su amiga a hacer genealogía en Bohemia. Ella, debido a su avanzada edad, estaba perdiendo la esperanza de encontrar a sus antepasados de Bohemia. Mike también estaba a punto de rendirse, pero el día anterior, cuando asistió al templo, sintió que la solución iba a llegar. Y así fue, por medio de nosotros. Así que quería transmitirnos la alegría y la gratitud que sintió por otro testimonio de la maravillosa manera en que la guía de Dios actúa en nuestra vida.

De las Escrituras conocemos la promesa de Moroni sobre cómo podemos saber que el Libro de Mormón es verdadero: “Y por el poder del Espíritu Santo podréis conocer la verdad de todas las cosas”1. Sobre la base de esta promesa, podemos contar con que recibiremos comprensión, conocimiento espiritual y respuestas a las preguntas básicas sobre la fe, la veracidad de las Escrituras o la restauración del Evangelio por medio del Espíritu Santo.

Pero esta promesa también afecta a la vida de cada uno de nosotros, a nuestras alegrías y preocupaciones cotidianas. El poder del Espíritu Santo nos ayuda a discernir las impresiones que provienen de Dios y el significado correcto de las cosas que nos suceden, o nos ayuda a tomar decisiones. Cada miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días recibe el don del Espíritu Santo después del bautismo y tenemos el privilegio de disfrutar de Su compañía, pero también tenemos el albedrío para decidir en qué medida la influencia de este Espíritu se manifestará en nuestra vida. Independientemente de que sintamos y entendamos Su guía si vivimos con pureza y nos esforzamos por vivir de acuerdo con el Evangelio de Jesucristo, o de que hagamos lo contrario, a veces nuestras acciones o nuestros pensamientos alejan al Espíritu. El presidente Nelson nos ha enseñado: “También podemos escucharlo con mayor claridad si refinamos nuestra capacidad de reconocer los susurros del Espíritu Santo. Nunca ha sido más necesario que en este momento saber cómo el Espíritu Santo les habla. En la Trinidad, el Espíritu Santo es el mensajero. Él les comunicará pensamientos a su mente que el Padre e Hijo desean que reciban“2.

Nuestro encuentro con Mike es un ejemplo de cómo actúa el Espíritu. Mike se esforzó por escuchar las impresiones del Espíritu Santo y, por medio de su disposición a ayudar a unos perfectos desconocidos, posteriormente no solo obtuvo ayuda para su amiga, sino que todos recibimos otro testimonio de la manera en que Dios, por medio del Espíritu, nos da respuestas y soluciones. Sí, fue algo pequeño, pero el gran mosaico del conocimiento espiritual en nuestra vida está formado por este tipo de cosas pequeñas y diminutas.

Alma dijo que “por medio de cosas pequeñas y sencillas se realizan grandes cosas”3. Les testifico de que no hay nada mayor ni más importante en la vida que el hecho de que, por medio de esas pequeñas experiencias con el Espíritu, lleguemos a conocer el amor, el interés y la gracia de nuestro Padre Celestial y de Su Hijo, Jesucristo. Sé que Dios existe y sé que Su Hijo, Jesucristo, resucitó y vive. Él es su Salvador y el mío, y esto me llena el corazón de gozo y gratitud. Ruego que nuestra forma de vivir cada día permita que el Espíritu nos comunique lo que el Padre y el Hijo quieren para nosotros. Ruego que lleguemos a conocerlos cada vez más, entendiendo esos mensajes, porque “esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado”4.

En el nombre de Jesucristo. Amén.