La Iglesia de Jesucristo brinda ayuda humanitaria a más de 1 millón de personas en 2023

El informe presentado detalla diversos proyectos de ayuda humanitaria que la Iglesia ejecutó en México durante 2023 de la mano de muchas organizaciones presentes y que incluyen entre otros, los siguientes:

• Alimentos y agua: La Iglesia donó, a través de varias organizaciones, alimentos y agua a más de 800 mil personas en México en 2023. Esto incluyó la distribución de alimentos enlatados, arroz, frijoles y otros productos básicos, así como la entrega de agua potable a comunidades en zonas rurales y refugios para migrantes.

• Educación: La Iglesia proporcionó ayuda para estudiar a más de 100 mil estudiantes en México en 2023. Esto ayudó a los jóvenes a continuar su educación y alcanzar sus metas académicas.

• Atención médica: La Iglesia trabajó con varias organizaciones para proporcionar atención médica a más de 200 mil personas. Esto incluyó la entrega de medicamentos, donación de equipo especializado, provisión de atención médica básica y la colaboración con clínicas y hospitales.

• Desastres y emergencias: La Iglesia también trabajó para ayudar a las personas afectadas por desastres naturales. En 2023, brindó ayuda a las personas afectadas por inundaciones y huracanes. La Iglesia recientemente anunció la donación de 10 mil despensas para los damnificados de Acapulco por el huracán Otis.

“Estamos agradecidos por la oportunidad de servir a los demás”, reiteró Guzmán, al tiempo que reconoció el profesionalismo de asociaciones dedicadas a trabajar por el bienestar de las personas más vulnerables como APAC, Un Kilo de Ayuda, Fundación CMR, Fundación Azteca, Fundación MVS, Fundación Teletón, Alimento para todos, sólo por mencionar algunos de los que estuvieron presentes. “Creemos que la ayuda humanitaria es una expresión de nuestro amor por Jesucristo y por nuestro prójimo” concluyó.

Por su parte, el Élder Ranulfo Cervantes -en representación de la presidencia de Área México- dirigió un mensaje a los asistentes en el que mencionó que desde 1936 “la Iglesia instituyó el programa de bienestar para asistir a los miembros en situaciones de necesidad y fortalecer su capacidad para ser autosuficientes. Muchas personas perciben nuestro programa de Bienestar como una herramienta para ayudar a los miembros de nuestra Iglesia que se encuentran en circunstancias difíciles transitorias”.

“El verdadero propósito del plan de Bienestar de la Iglesia es mucho más amplio; también incluye fomentar la autosuficiencia como un modo de vida”, subrayó Cervantes, y explicó que la autosuficiencia “abarca diversas facetas de una vida equilibrada, entre ellas: la formación académica; la salud; el empleo; la producción de alimentos y su almacenamiento en el hogar; la economía familiar; y la fortaleza espiritual”.

El Élder Cervantes explicó que los miembros de la Iglesia de Jesucristo ayunan una vez al mes y donan el dinero que hubieran gastado en esos alimentos, para ayudar al pobre y al necesitado.

“Gracias a la labor que hacen, a su generosidad y esa pasión por ayudar al prójimo, hemos sido beneficiados”, comentó Jacqueline Beuchot, directora de sostenibilidad de FUCAM. “El año pasado fuimos beneficiados con monitores de grado médico para poder detectar y diagnosticar a tiempo a mujeres con cáncer de mama con equipos de alta calidad que impactan a todo el país. Me quedo impresionada con los números de la ayuda humanitaria que (hizo la Iglesia) a lo largo del año en todos los temas importantes. Me queda claro que si no podemos ayudar a todos, todos podemos ayudar a alguien y (la Iglesia) lo hace de una manera impecable y con una pasión y una vocación ejemplar”.

Por su parte Ana Leyva, gerente de gestión e inversión social del Banco de Alimentos de México, indicó que la Iglesia ha sido “un gran aliado para la seguridad alimentaria. Se han sumado a diferentes proyectos en diferentes estados… y también queremos seguir reforzando el trabajo que hacen los bancos de alimentos en el país, seguir reforzando la infraestructura. Si contamos con bancos de alimentos sólidos, podremos llegar a más comunidades con más alimentos” puntualizó.

“Estoy impactada. Es una estructura increíblemente organizada y me encantó saber que donan el ayuno en el mundo entero para ayudar al más necesitado. Me encantó saber todos los proyectos en los que están involucrados. Creo que definitivamente estamos en el mismo canal: solo volteando a ver al más necesitado y sumando los esfuerzos podemos tener un mundo mejor”, dijo por su parte Clara Poumián de Asociación Gilberto.

Adicionalmente la Iglesia de Jesucristo en México concluyó con éxito la campaña de recaudación de fondos para organizaciones de ayuda humanitaria a través de las Máquinas de Donación, Ilumina el Mundo.

Se recibieron más de 2,400 donaciones a través de esta novedosa y divertida manera de donar. Las Máquinas de Donación estuvieron en Ciudad de México, Puebla, Tula, Pachuca y Cuernavaca durante la temporada decembrina. Las asociaciones que participaron en esta ocasión fueron Un kilo de Ayuda, APAC, Save the Children, Construyendo Esperanza y la Red de Bancos de Alimentos de México.